Título : |
Festividad de la santísima Cruz de Cojata y el proceso de cambio |
Tipo de documento: |
texto impreso |
Autores: |
Maruja Ojeda Chalco, Autor |
Editorial: |
Puno : Universidad Nacional del Altiplano. Facultad de Ciencias Sociales. Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación Social |
Fecha de publicación: |
2005 |
Número de páginas: |
115 pàginas |
Il.: |
ilustraciones, mapas, tablas |
Dimensiones: |
30 cm. |
Nota general: |
Para Optar el Título Profesional de Licenciado en Antropología |
Idioma : |
Español (spa) |
Clasificación: |
[Agneaux] Depreciaciones - Contabilidad
|
Resumen: |
Organización, procesos de cambio y prácticas rituales de festividad. Los preparativos que se realiza antes y durante la fiesta; los cuales consisten en la elaboración de la Chicha, preparados en chombas y elaborados con arroz, maíz y maní; por otro lado, la elaboración de cirios, comúnmente llamado “Cera Huaraña”, fabricado con el cebo de alpaca y oveja. Elaboración de brebajes y el preparativo culinario, está a cargo del servicio mayor, que se ofrecerán los invitados. La festividad más grande de esta zona, es la fiesta del mes de mayo, dedicado con devoción y fervor a la Santísima Q’ala Cruz. En su interior lleva una responsabilidad ya antelada, el compromiso con el santo madero, para cargarlo en sus hombros y pasar su alferado, unido al amor que siente por la tierra que le vio nacer. Para pasar el cargo de alferado, se tiene que coordinar internamente con la familia y para luego anticipar meses antes al alferado del año. En cuanto al programa festivo de la celebración, se da inicio con las velaciones, para asistir a este acto litúrgico, el único medio para hacer las invitaciones, es mediante el anuncio de los cohetones. Culminada las velaciones; el sacrifico de animales, se convierte en un acto de trascendencia, los ganados a sacrificar son traídos por sus propietarios, ahijados, compadres y pobladores, que se comprometieron a través de las apjatas. 03 de Mayo, día de la entrada de cirios, en honor a la Santísima Cruz; para esta celebración, el santo madero estrenará un nuevo sudario, que se ha mandado a confeccionar; luego los visitantes en fila de dos, se dirigen al atrio de la catedral, precedidos por la santa imagen y horas más tarde se celebra las vísperas, la cual es homenajeada con ponches y quema de fuegos artificiales. Día central de la fiesta, sale otra vez en procesión, por las principales calles del pueblo y al llegar al frontis de la catedral, el altarero recepciona a todos los asistentes en el altar. Una vez culminado esta actividad, la santísima cruz sube al atrio de la iglesia, para ser bendecido y bendecir al nuevo alferado. Participación cultural folklórica, se manifiesta por parte de las comparsas de danzarines, constituido en tres conjuntos; dos de ellos fundados en la localidad y el otro conformado por los residentes bolivianos. Pueblo a través de sus mecanismos de reciprocidad, que son comúnmente conocidos como las “apjatas”. Otro mecanismo de reciprocidad, es la cosmovisión andina; la cual, hace que la población cojateña, retribuya con prácticas rituales al crucificado, para que esta a su vez, les bendiga en sus actividades económicas. Práctica ritual, se expresa a través de una secuencialidad, seguida por la mayoría de alferados; que se da inicio con el tradicional K’inthu, luego la T’inkha y junto a ella el Tupo, y para finalizar su respectiva Ch’alla. |
Link: |
https://biblioteca.unap.edu.pe/opac_css/index.php?lvl=notice_display&id=73040 |
Festividad de la santísima Cruz de Cojata y el proceso de cambio [texto impreso] / Maruja Ojeda Chalco, Autor . - Puno : Universidad Nacional del Altiplano. Facultad de Ciencias Sociales. Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación Social, 2005 . - 115 pàginas : ilustraciones, mapas, tablas ; 30 cm. Para Optar el Título Profesional de Licenciado en Antropología Idioma : Español ( spa)
Clasificación: |
[Agneaux] Depreciaciones - Contabilidad
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Resumen: |
Organización, procesos de cambio y prácticas rituales de festividad. Los preparativos que se realiza antes y durante la fiesta; los cuales consisten en la elaboración de la Chicha, preparados en chombas y elaborados con arroz, maíz y maní; por otro lado, la elaboración de cirios, comúnmente llamado “Cera Huaraña”, fabricado con el cebo de alpaca y oveja. Elaboración de brebajes y el preparativo culinario, está a cargo del servicio mayor, que se ofrecerán los invitados. La festividad más grande de esta zona, es la fiesta del mes de mayo, dedicado con devoción y fervor a la Santísima Q’ala Cruz. En su interior lleva una responsabilidad ya antelada, el compromiso con el santo madero, para cargarlo en sus hombros y pasar su alferado, unido al amor que siente por la tierra que le vio nacer. Para pasar el cargo de alferado, se tiene que coordinar internamente con la familia y para luego anticipar meses antes al alferado del año. En cuanto al programa festivo de la celebración, se da inicio con las velaciones, para asistir a este acto litúrgico, el único medio para hacer las invitaciones, es mediante el anuncio de los cohetones. Culminada las velaciones; el sacrifico de animales, se convierte en un acto de trascendencia, los ganados a sacrificar son traídos por sus propietarios, ahijados, compadres y pobladores, que se comprometieron a través de las apjatas. 03 de Mayo, día de la entrada de cirios, en honor a la Santísima Cruz; para esta celebración, el santo madero estrenará un nuevo sudario, que se ha mandado a confeccionar; luego los visitantes en fila de dos, se dirigen al atrio de la catedral, precedidos por la santa imagen y horas más tarde se celebra las vísperas, la cual es homenajeada con ponches y quema de fuegos artificiales. Día central de la fiesta, sale otra vez en procesión, por las principales calles del pueblo y al llegar al frontis de la catedral, el altarero recepciona a todos los asistentes en el altar. Una vez culminado esta actividad, la santísima cruz sube al atrio de la iglesia, para ser bendecido y bendecir al nuevo alferado. Participación cultural folklórica, se manifiesta por parte de las comparsas de danzarines, constituido en tres conjuntos; dos de ellos fundados en la localidad y el otro conformado por los residentes bolivianos. Pueblo a través de sus mecanismos de reciprocidad, que son comúnmente conocidos como las “apjatas”. Otro mecanismo de reciprocidad, es la cosmovisión andina; la cual, hace que la población cojateña, retribuya con prácticas rituales al crucificado, para que esta a su vez, les bendiga en sus actividades económicas. Práctica ritual, se expresa a través de una secuencialidad, seguida por la mayoría de alferados; que se da inicio con el tradicional K’inthu, luego la T’inkha y junto a ella el Tupo, y para finalizar su respectiva Ch’alla. |
Link: |
https://biblioteca.unap.edu.pe/opac_css/index.php?lvl=notice_display&id=73040 |
Festividad de la santísima Cruz de Cojata y el proceso de cambio
Organización, procesos de cambio y prácticas rituales de festividad. Los preparativos que se realiza antes y durante la fiesta; los cuales consisten en la elaboración de la Chicha, preparados en chombas y elaborados con arroz, maíz y maní; por otro lado, la elaboración de cirios, comúnmente llamado “Cera Huaraña”, fabricado con el cebo de alpaca y oveja. Elaboración de brebajes y el preparativo culinario, está a cargo del servicio mayor, que se ofrecerán los invitados. La festividad más grande de esta zona, es la fiesta del mes de mayo, dedicado con devoción y fervor a la Santísima Q’ala Cruz. En su interior lleva una responsabilidad ya antelada, el compromiso con el santo madero, para cargarlo en sus hombros y pasar su alferado, unido al amor que siente por la tierra que le vio nacer. Para pasar el cargo de alferado, se tiene que coordinar internamente con la familia y para luego anticipar meses antes al alferado del año. En cuanto al programa festivo de la celebración, se da inicio con las velaciones, para asistir a este acto litúrgico, el único medio para hacer las invitaciones, es mediante el anuncio de los cohetones. Culminada las velaciones; el sacrifico de animales, se convierte en un acto de trascendencia, los ganados a sacrificar son traídos por sus propietarios, ahijados, compadres y pobladores, que se comprometieron a través de las apjatas. 03 de Mayo, día de la entrada de cirios, en honor a la Santísima Cruz; para esta celebración, el santo madero estrenará un nuevo sudario, que se ha mandado a confeccionar; luego los visitantes en fila de dos, se dirigen al atrio de la catedral, precedidos por la santa imagen y horas más tarde se celebra las vísperas, la cual es homenajeada con ponches y quema de fuegos artificiales. Día central de la fiesta, sale otra vez en procesión, por las principales calles del pueblo y al llegar al frontis de la catedral, el altarero recepciona a todos los asistentes en el altar. Una vez culminado esta actividad, la santísima cruz sube al atrio de la iglesia, para ser bendecido y bendecir al nuevo alferado. Participación cultural folklórica, se manifiesta por parte de las comparsas de danzarines, constituido en tres conjuntos; dos de ellos fundados en la localidad y el otro conformado por los residentes bolivianos. Pueblo a través de sus mecanismos de reciprocidad, que son comúnmente conocidos como las “apjatas”. Otro mecanismo de reciprocidad, es la cosmovisión andina; la cual, hace que la población cojateña, retribuya con prácticas rituales al crucificado, para que esta a su vez, les bendiga en sus actividades económicas. Práctica ritual, se expresa a través de una secuencialidad, seguida por la mayoría de alferados; que se da inicio con el tradicional K’inthu, luego la T’inkha y junto a ella el Tupo, y para finalizar su respectiva Ch’alla.
Ojeda Chalco, Maruja -
Puno : Universidad Nacional del Altiplano. Facultad de Ciencias Sociales. Escuela Profesional de Ciencias de la Comunicación Social - 2005
Para Optar el Título Profesional de Licenciado en Antropología
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